Este artículo es el nº3 de la serie relacionada con la Meditación y Karma Yoga: Viveka
El discernimiento (viveka) se desarrolla gracias a experimentar la ininterrumpida condición de los eventos Reales, es decir, de aquellos que hacen parte «del aquí y del ahora». Una mente diestra en el acto de estar constantemente atenta sin esfuerzo alguno a «lo que está aconteciendo» desarrolla la cualidad de entender algo Real que está más allá de la experiencia misma de la historia y del futuro. El discernimiento (viveka) no es el intelecto o la cualidad inteligente de la cual nos orgullecemos tanto en Occidente. […]
Un paso intermedio a la procura del discernimiento (viveka) es la ejercitación en la realización de la acción recta o karma yoga. En verdad, la acción es inferior al conocimiento; sin embargo, a un estudiante con un intelecto inconstante en la apreciación del Presente es necesario adiestrarlo en la importancia de la acción como medio de purificación de la mente. De ahí que la realización de la acción recta y una activa responsabilidad ante los compromisos adquiridos en el mundo, ya sean personales o colectivos, se convierte en un medio correcto de vida que un día permitirá florecer el discernimiento metafísico o viveka. […]
La acción, para realizarse acorde a los cánones que el Vedanta establece como recta, requiere básicamente de dos condiciones: No apetencia al fruto de la acción y ausencia de sentido de yoidad en el acto que se ejecuta.
Bibliografía: “Vedanta Advaita” de Sesha